En la Isla del Rey, la cultura paleocristiana y el arte contemporáneo se mezclan en Hauser & Wirth Menorca. Este espectacular proyecto incluye ocho galerías de exposición, esculturas al aire libre y jardines con plantas autóctonas. Allí también podrás disfrutar del restaurante Cantina, especializado en productos locales, y visitar su tienda de arte y artesanía menorquina. Descubre esta cara de Menorca, como referente del arte contemporáneo mundial.
Céret, a únicamente 12 km de la frontera española, es famosa por ser la cuna del cubismo y la «capital de la cereza». Este fascinante pueblo medieval alberga el Musée d’art Moderne. Una visita imprescindible que ofrece arte moderno, un pintoresco paseo por viñedos y granjas, y las primeras cerezas de la primavera.
Aix en Provence cuenta con un clima privilegiado, deslumbra con su elegancia en sus animada calles y plazas. Pasearemos por el centro histórico con edificios del siglo XVII y XVIII, plazas con fuentes, librerías, tiendas y comercios variados. Descubriremos el Ayuntamiento, museos y grandes mansiones, ahora dedicadas a la Universidad y centros de investigación.
A pocos kilómetros de Saint Tropez, Port Grimaud, diseñado por François Spoerry, combina el encanto de un pueblo pesquero mediterráneo con el lujo de un complejo de viviendas moderno. Recorre sus canales en barcazas, entre casas de colores pastel y puentes. Luego, explora el pintoresco pueblo montañoso de Grimaud, con sus sinuosas callejuelas y artesanos locales, culminando en su notable fuente monumental.
Vive una experiencia sensorial única en Ajaccio. Prueba la miel de Córcega, famosa por su variedad y sabor, gracias a una rica biodiversidad. Luego, visita una destilería de aceites esenciales ecológicos, donde se producen 13 aceites, agua floral y aceites para masajes. Explora los aromas y sabores que hacen de Córcega un lugar especial.
No te olvides de visitar la destacada quesería Finca Subaida en Mahón, donde conocerás el proceso de elaboración del queso Mahónés (D.O.P.), emblema de la gastronomía balear. Deléitate con un aperitivo en su terraza, degustando quesos, embutidos y vinos locales, un regalo para el paladar de los amantes de la buena mesa y los productos artesanales de la región.